Hay un barrio que en antaño la ciudad de Gijon de el se avergonzaba , pues decían los playos que del Bronx se trataba .
Cuando a Gijon bajabas y a alguien le decias que eras de la calzada los hombres y las mujeres sus carteras y bolsos guardaban.
Pero con el paso de los años y el esfuerzo de sus gentes ese patito feo al que algunos despreciaban en un hermoso cisne se ha convertido para envidia de Playos y vecinos de otras barriadas .
Por el locuelo Franastur desde el barrio de Gijon para la Ciudad de la calzada 10-07-2014

documento propiedad de:

C.P. PRÍNCIPE DE ASTURIAS (Gijón, España)

logotipo del colegio
     

HISTORIA

 

A medida que el barrio iba creciendo, puesto que se establecieron en la zona muchas industrias y, sobre todo, por los efectos de la nueva política siderúrgica y la potenciación del puerto desde 1960, por la necesidad de mano de obra para la construcción de UNINSA, empresa que construyó un grupo de bloques en este barrio para viviendas de sus trabajadores y generó un gran flujo de inmigrantes en la mayoría intraprovinciales, pero también extraprovinciales.

   
Viviendas para trabajadores de UNINSA

Cabe señalar que por esta zona a partir de 1952, fecha en que el Patronato Laboral Francisco Franco construyó un grupo de viviendas en el Natahoyo, el Instituto Nacional de la Vivienda construyó en Jove un grupo de 114 viviendas para los portuarios del Musel (finales de los 40), otro tanto hicieron un grupo de empresas, como Tabacalera, La Constructora Gijonesa, Gijón Fabril, UNINSA, citada anteriormente, etc. en La Calzada, al igual que la iniciativa oficial también construyó muchos edificios al amparo de la legislación de viviendas bonificables y subvencionadas, (Grupo San Marcos, de la calle Chile, por ejemplo), fecha (1967) en la que el antiguo edificio se cambia por el actual, el barrio y, sobre todo el Colegio, creció enormemente y las calles empezaron a ser asfaltadas, siendo una de las primeras la calle Oriental, próxima al colegio.

   
Escuela de La Constructora

Aparte de la población que se incorporó al barrio y sus proximidades por la construcción de todos estos bloques de viviendas, para la construcción de UNINSA, incluyendo a la que posteriormente se colocó una vez puesta a funcionar,  y la que se necesitaba para la ampliación del Musel., había una gran demanda de mano de obra para otras actividades asentadas en la zona,  como La Algodonera, Tetracero, Marítima del Musel, Astilleros del Cantábrico, Astilleros Riera, S.M. Duro Felguera, Fábrica de Mieres y Moreda, Esmena, Crady, SIA de Moreda, Adaro y Avello (velomotores), Fábrica de cervezas "La Estrella de Gijón",  o empresas surgidas a expensas de las grandes en los nuevos polígonos de expansión industrial creados en el barrio de Tremañes -BANKUNIÓN Y PROMOSA.

   
Fachada colegio por Avda Argentina

Por estas fechas de finales de la década de los 60 y todos los 70, el "Colegio Nacional Miguel Primo de Rivera" ("El Primo", como cariñosamente le llamaban -¡y le llaman!- muchos de sus alumnos, sus ex-alumnos y la gente del barrio) tuvo la mayor cantidad de alumnado, llegando a superar los 1.500, por lo que tenía que ocupar más espacios que los propios del centro recién construido. Así, tenía aulas en el mismo centro, en unos pabellones construidos próximos a la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima, en PIVASA, nave de la calle de Los Andes, convertida ahora en bloques de viviendas, en La Escuela del Grupo de viviendas creada por la Constructora Gijonesa (1965) de la calle Chile, que ahora es Centro de Educación de Adultos, en la calle Venezuela, donde se encontraban las aulas de Educación Especial, en unos bajos de los edificios de La Algodonera  y en las proximidades de la playa de La Casera, hoy playa de L'Arbeyal, donde había también otras 4 unidades. Llegó a tener el centro unas 57 unidades con una ratio muy superior a la que tenemos hoy en día.

 

 

Playa el arbeyal

 

Playa del Arbeyal

 

La playa de El Arbeyal es la tercera playa en importancia de Gijón, lindante con los populares barrios de La Calzada y de El Natahoyo, es una playa muy querida que ha recuperado su aspecto originario tras décadas de quedar relegada frente al auge industrial de la zona. Son estos barrios, además, los que conceden a la playa su idiosincrasia y su dinamismo. Habitualmente son los usuarios de la playa los mismos que son asiduos a los parques, salas de cine, al popular ateneo de la Calzada, a su complejo polideportivo, los mismos que componen las numerosas asociaciones en esta zona de la ciudad. Una zona que es socialmente muy activa, y que también lo es urbanísticamente, haciendo crecer a Gijón, cada año que pasa, más hacia el oeste.

Mirando pasar Camiones. Cuatro Caminos. La Calzada.Gijón

 














Durante varios días consecutivos los encontraba a padre e hijo sentados en el mismo lugar ya hiciera sol o sombra. A mi sinceramente el lugar siempre me ha parecido un lugar inhóspito y peligroso por la intensidad de trafico que solo toma un descanso cuando el semáforo se pone en verde para facilitar el paso de los peatones.
Así que decidí sentarme una mañana en su mismo banco para poder saber que era que eso que tanto les llamaba la atención y que ellos venían observando desde sabe dios cuanto tiempo. Hablar lo que se dice hablar hablaban poco, el chaval señalaba con el dedo y emitía algún sonido ininteligible, a lo que el padre respondía con un asentimiento de cabeza o de hombros. Al principio llame su atención cuando me senté en a su lado, pero les duró poco, enseguida siguieron a lo suyo observar como pasaban los camiones, los autobuses, el ALSA, las motos…
Los camiones con mercancías a granel cuando se dirigen al puerto de el Musel, van con las lonas reglamentarias, pero ¡ay! cuando esos mismos camiones vienen de vuelta, entonces vienen sin los toldos, con lo cual van ventilando todo el polvillo que ha quedado dentro del remolque, con lo cual hace de este cruce de Cuatro Caminos, uno sino el más donde el aire se hace mas espeso y masticable, deja en el paladar un sabor amargo, por lo que se ve la combinación de partículas de carbón, cemento , arena no es del gusto del paladar.
A veces, tengo la sensación de que una goma de borrar ha pasado por mi memoria, en este caso me ha borrado el nombre del padre y del hijo y eso que creo recordar que alguna vez he estado en su casa, pues quiero recordar que yo era amigo de su hermano.
Quiere ser esta crónica un homenaje al padre, que siempre hasta donde me alcanza mi memoria se lo ha visto acompañando a su hijo deficiente a todas partes. No quiero ni pensar que será de este chico el día que falte su padre.
Y para finalizar este relato una sugerencia político terapéutico. Sería interesante que la corporación en pleno viniera a celebrar una reunión consistorial a este punto de la Calzada y comprobara en su paladar de lo que estamos hablando, y luego para matar este amargor pueden ir a Casa Toni, o la Pipa a enjuagarse la boca con un culín de sidra.
Terapéutico, este punto está especialmente recomendado para todas aquellas personas que padezcan algún problema respiratorio o que les interese tenerlo y de paso pueden hacerles compañía al padre y el hijo que pasan la mañana viendo pasar camiones…